miércoles, 15 de abril de 2020

PRESENTACION INSTALACIONES Y EQUIPOS PECUARIOS




INSTALACIONES GANADERAS

A la hora de establecer alojamientos o instalaciones para los bovinos hay que tener en cuentas exigencias tales como:

1.    El área por cabeza debe ser suficiente, sin ajustarse al criterio de mínimos posibles.
2.    Brindar comodidad a los animales evitando el hacinamiento.
3.    Proporcionar protección contra efectos climáticos adversos.
4.    Garantizar la higiene de los animales a través de un buen diseño y mantenimiento.
5.    Facilitar la labor diaria del personal, disminuyendo esfuerzos y optimizando flujos.
6.    Construir con materiales adecuados, económicos y duraderos.

Se establece que también se deben tener en cuenta factores como el clima, la altitud, los vientos, la topografía, la ubicación de otras granjas y la producción de forrajes.

De igual modo, hay que analizar qué tipo de animales se van a alojar (vacas, terneros, novillos), su nivel de producción, sin dejar de tener en cuenta aspectos de salud y bienestar animal. Otros requisitos tienen que ver con el respeto de la legislación ambiental y del nicho ecológico.

De acuerdo a las Buenas Practicas Ganaderas, BPG, se refiera a la infraestructura de las fincas ganaderas así:
Ubicación del predio
De acuerdo con el Plan de Ordenamiento territorial de cada municipio están definidas las áreas dedicadas a un uso del suelo en actividades agropecuarias, las cuales se deben tener en cuenta cuando se establezcan nuevos predios.
Se deben evitar sitios cercanos a botaderos de basura, aguas contaminadas, plantas de sacrificio, industrias y lugares que signifiquen un riesgo sanitario para el hato.

Instalaciones y áreas generales
Las áreas y las instalaciones deben estar distribuidas de tal manera que faciliten el manejo de los animales y que no ofrezcan peligro tanto para los operarios como para los mismos animales.
Se debe contar con corrales o potreros destinados al manejo de animales enfermos o que requieran un manejo especial, como paritorios, terneriles o sala cuna y corral de cuarentena.
Las estructuras de manejo como corrales, bretes, embarcaderos, deben facilitar el adecuado manejo de los animales. Para los pisos se deben utilizar materiales que eviten las caídas y resbalones, que agilicen la remoción de excretas y además sean fáciles de lavar y desinfectar.
Las áreas destinadas a confinamiento deben ofrecer comodidad a los animales que allí se alojen.
Un manejo apropiado de las áreas de almacenamiento, evita la contaminación cruzada de los insumos que allí se guarden. Se debe contar con áreas cerradas y separadas para medicamentos veterinarios, insumos de aseo, suplementos y alimentos concentrados, fertilizantes, productos agrícolas e implementos utilizados en su aplicación, teniendo cuidado además de identificarlas en un lugar visible.
Para el manejo de excretas se debe disponer de un sitio apropiado para su disposición, o un sistema de tratamiento adecuado como un biodigestor.
El programa de limpieza y desinfección de instalaciones y áreas debe estar escrito y tiene que ser conocido por todos los operarios encargados de las diferentes labores que se realizan en el predio.
Instalaciones pecuarias y áreas para la producción de leche
El sitio en el cual se realice el ordeño debe estar protegido de tal forma que las vacas estén tranquilas y cómodas y ofrezca además seguridad al ordeñador.
Bien sea que el ordeño se realice en los potreros o en establo fijo, se deben cumplir con normas mínimas de infraestructura física.
El área destinada al ordeño, bien sea en potrero o en sala, debe estar localizada en un terreno de fácil drenaje, donde no haya encharcamientos para evitar la contaminación de la leche.
En todos los casos se debe contar con agua potable para realizar las labores de ordeño. Además de la sala de ordeño se debe contar con zona de almacenamiento donde se guarden los equipos e implementos usados en el ordeño, aparte de los insumos.
La disposición de las áreas y equipos dentro de la sala de ordeño, deben facilitar un flujo lógico y continuo, tanto de los animales, como de los operarios y de la leche obtenida en el proceso. Los materiales utilizados en la construcción de estas áreas deben ser fáciles de limpiar y desinfectar y que en ningún momento presenten riesgo de contaminación.
Los implementos, utensilios y equipos utilizados durante el ordeño y en el almacenamiento de la leche, deben estar diseñados de tal forma y construidos con materiales, que eviten el riesgo de contaminación. Las superficies que entran en contacto directo con la leche como pezoneras, tuberías y tanques, deben estar hechos de materiales inocuos, que no contaminen la leche.
Las paredes y mesones del cuarto de leche, donde se encuentran las bombas del ordeño mecánico y se realiza el lavado del equipo, deben estar cubiertos de materiales de grado alimenticio, pinturas y cobertura, evitando rincones, hendijas y fisuras donde se pueda acumular suciedad.
La sala en la cual se realiza el ordeño, bien sea con ordeño mecánico o en forma manual, debe cumplir con requerimientos de infraestructura específicos que se encuentran en el decreto 616 del 28 de febrero de 2006, en el Título II, Capítulo II, Artículo 5, numeral a.
De igual manera, los pisos deben estar construidos de un material que facilite su limpieza y desinfección.
Los establecimientos que cuenten con tanque de enfriamiento, deben disponer de un cuarto dedicado solo a este fin, además es necesario llevar un registro para el control de temperatura de la leche allí almacenada. Las paredes y pisos deben ser completamente lisos en un material no poroso, de fácil limpieza y desinfección, los sifones de drenaje en el suelo deben llevar rejilla y las ventanas deben impedir la entrada de roedores, aves y otros animales. La persona encargada del manejo del cuarto del tanque frío debe tener a mano y conocer el protocolo de manejo, limpieza, desinfección y control de plagas, tanto del tanque, como del cuarto que lo alberga.
Se debe establecer un programa sanitario en todos los hatos con ordeño mecánico con el fin de minimizar los riesgos de contaminación de la leche. Debe haber en el predio una persona responsable de este programa y debe estar disponible para las autoridades competentes que lo requieran. Este plan sanitario debe incluir como mínimo los programas de limpieza y desinfección, manejo de desechos sólidos y líquidos, y programa para control de plagas. Estos programas deben estar bien documentados y al alcance de quienes los ejecute en el predio; los operarios deben conocerlos y seguir las instrucciones como se indica en cada uno de ellos.